El Polifonik Sound y su verbena musical

Casi a la vez que el verano llegaba el Polifonik Sound de Barbastro, y con él, el inicio de la temporada de llenar las muñecas de pulseras. Ahora que el futbol está en boca de todos con el Mundial podríamos hacer un símil futbolero con el festival, el Polifonik, por fechas y tamaño, sería el perfecto torneo de pretemporada, ideal para cargar las piernas y coger el ritmo festivalero.

El verano es muy largo y el Polifonik ofrece un ambiente magnifico, conciertos de primera fila y un cartelazo espectacular que llena dos días de buena música. El viernes arrancaba con Angel Stanich para empezar a carburar y calentar el ambiente y no hay duda que para eso Stanich va como anillo al dedo. Le Tour 95, Metralleta Joe, Mátame Camión y todo listo para dejarse llevar.

Angel Stanich (Foto: Oriol Vives)

Tampoco faltaron las posturas rockeras y elegantes de Mi Capitán. Este grupo de músicos, pero sobretodo de amigos, no necesitan un gran escenario para sacar su energía y arrasar entre el público asistente. Energía, rock sofisticado y pasión. Y, después de sudar la gota gorda, Carlos Sadness trajo a Barbastro sus aires veraniegos, playeros, surferos… Carlos Sadness es buen rollo, empieza su concierto y te vas a surfear a Honolulu o a dónde te lleve.

Mi Capitán (Foto: Oriol Vives)

El sábado, maratón final prácticamente sin tiempo ni para cenar. Primero, Rufus T Firefly presentando su nuevo disco pero sin olvidar temas que los convirtieron en uno de los grupos top del año pasado, impecables en la oscuridad de su escenario. Hay que reconocer que son un dolor de cabeza para los fotógrafos como servidor.

Después, llegaron casi sin descanso uno de los jefes de la escena indie desde hace años, La Habitación Roja. En Indie Lovers cada uno de nosotros tiene sus debilidades y yo, con ellos, no puedo ser objetivo. La habitación Roja sacó a escena sus himnos, que no son pocos, y temas de Memoria que en breve lo serán también. Lo mas importante es verles en forma y larga vida a LHR tras el susto de hace no demasiado.

La Habitación Roja (Foto: Oriol Vives)

Sin tiempo para recuperarnos llegó la felicidad completa al Polifonik con La Casa Azul. Guille Milkyway hizo lo que mejor sabe hacer, que la gente salte, baile, se bese y cante los hits clásicos y los mas nuevos como Ataraxia, recién estrenado.

Y así, flotando de concierto a concierto llegamos al fin de fiesta, aunque con ellos también podría ser fin de fiestón. Grises nunca será un concierto tranquilo, imposible. Transmiten esa fuerza con la que cantan y tocan y eso se contagia al público que se deja llevar a dónde los vascos quieran. Grises también presentan disco este año y nos mostraron canciones de Peces y Árboles en directo sin olvidarse de Parfait, Wendy o Animal. Final de traca para el Polifonik Sound.

Grises (Foto: Oriol Vives)

Un plan perfecto para la verbena de San Juan. Nosotros seguro que repetiremos el próximo año. Si vosotros también queréis una verbena diferente y repleta de buena música, ya sabéis. ¡Barbastro y el Polifonik os esperan!

(Texto y fotos de Uri Vives)

Escrito por

Periodista y alma viajera. Me gusta el movimiento y no entiendo la vida sin música. Conciertos y viajes son mis placeres culpables

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