Qué nos dice… SIDE CHICK

Side Chick (Foto: Aurora Bean)

Cualquiera que conozca a Maïa Vidal la relacionará seguramente con sus discos en solitario o como Your Kid Sister, y esos sonidos frágiles, intimistas y jugando en todo momento con sonoridades elaboradas y complejas. Pero como ya desvelamos en su paso por nuestro programa en Scanner FM en abril de 2016, los inicios de la Maïa adolescente fueron en la escena punk estadounidense, con su banda Kiev. En tiempos convulsos para el mundo, Maïa ha decidido rescatar su lado más desbocado en un nuevo proyecto junto al batería venezolano Eduardo Benatar y la joven catalana Scarlett: Side Chick. Una banda que sólo podía haber surgido en el siglo XXI, gracias a las casualidades y a una aplicación para ligar. Este viernes 13 de octubre hacen su concierto de debut en la sala Sidecar de Barcelona junto a los ganadores del último Bala Perduda, Sharman Den (tenemos dos entradas dobles para sortear entre los que compartan en nuestras redes sociales!). Maïa Vidal nos recibe en su casa para explicarnos los detalles de su nueva aventura musical.

Side Chick (Foto: Aurora Bean)
Side Chick (Foto: Aurora Bean)

INDIE LOVERS: Maïa, explícanos qué es esto de Side Chick y de dónde sale.

MAÏA VIDAL: Antes de nada, gracias por venir a mi casa. Es la entrevista más cómoda de mi vida (risas). 

INDIE LOVERS: Doy fe de que no va en pijama, aunque las horas darían para ello (risas).

MAÏA: (risasBueno, este es mi nuevo proyecto, que empezó en febrero, hace 8 meses. Empezó como un capricho. Yo decía en broma, “vamos a empezar a tocar juntos, y tal…”. Yo tengo mi música, y he estado estos últimos 7 años haciendo mi proyecto, Maïa Vidal. Por un lado, sentía esa curiosidad de volver a mis raíces punk y tocar un poco de rock’n’roll. La cosa es que conocí a mi banda en Tinder. Primero el batería, Eduardo Benatar. De hecho, su perfil de Tinder no decía que era batería. Creo que había una foto, pero no decía mucho en su perfil. Es el batería de Luz Verde, que es una banda mítica venezolana nominada para los Latin Grammy. Son muy grandes. Empezamos en plan “podría ser interesante tocar…”. Él tiene un estilo más rockero. Le dije que antes tocaba el bajo, pero hacía 10 años que no lo tocaba. Empezó en plan ‘ja, ja, ja’. Me compré un bajo en Wallapop, en plan “Por qué no? Vamos a tocar; sería gracioso”. Y empezaron a salir esas canciones inmediatas, como de repente. Y me di cuenta de que me estaba retroalimentando mucho. A veces empezaba a componer una canción para mi, porqué también estoy preparando un disco de Maïa Vidal, y el tema de repente parecía más rockero. O un día me ponía a componer algo para Side Chick, y me salía algo para Maïa Vidal. Vi que me alimentaba a nivel de inspiración. Y luego conocí a Scarlett también en Tinder. Ella tenía fotos tocando la guitarra y dije “oh! Mira, qué guapa!”. Y empezamos a tocar juntos, y fue una especie de encuentro que para todos es nuestro proyecto de al lado. Y entonces lo llamamos Side Chick, que quiere decir ‘la otra’, ‘la chica de al lado’. Nuestra ‘otra’ se ha convertido en algo con lo que, aunque es la ‘Side Chick’, estamos muy ilusionados y le estamos dando mucho amor.

INDIE LOVERS: Está claro que es una banda del siglo XXI, porqué Tinder, Wallapop…         

MAÏA: (risas). Exacto! No conocí a mis músicos en Myspace, sino en lo siguiente! En ese sentido sí es algo de nuestro siglo, pero yo creo que a nivel de sonido quisimos volver a algo más de mi adolescencia, o la de Eduardo. Scarlett es muy joven (risas). Las primeras composiciones que hice en mi vida fueron cuando tenía 14 o 15 años. Sería ¿2002? ¿2003? ¿2004?…

INDIE LOVERS: No quiere revelarnos su edad… (risas)

MAÏA: Mas que nada es que soy muy mala con las matemáticas (risas). Tenía un grupo punk en esa época que se llamaba Kiev. Yo empecé a componer en ese ámbito. Cuando volví a esas raíces, a tocar el bajo, con púa, con la correa súper baja para que el bajo se quedara en las rodillas, y un montón de actitud, las composiciones vinieron muy fácilmente. Después de un par de meses teníamos 5 o 6 temas, empezamos a grabar, y la cosa ha evolucionado muy rápidamente. Pero el sonido me hace pensar en esas bandas punk de principios del 2000, pero con un rollo un poco 80’s, o 90’s también. Aunque nos conocimos en ese ámbito muy de ahora, estamos yendo a un sitio crudo y salvaje: guitarra, bajo, batería y un poco de sinte, dos voces… todo muy inmediato, puro y duro.

Side Chick (Foto: Aurora Bean)
Side Chick (Foto: Aurora Bean)

INDIE LOVERS: ¿Por qué crees que te ha vuelto a salir otra vez esta vena más visceral, más salvaje, más primaria…?

MAÏA: Pues es interesante, porqué por un lado, empecé con Your Kid Sister hace ya 7 años. Son 7 años de estar sólo pensando en mi proyecto solista, mis pensamientos, un universo muy personal, muy currado. He creado esta especie de nido donde me siento cómoda. Cuando empecé con mi primer disco decía eso, que yo no me sentía cómoda en la vida real, y entonces me había hecho este ‘cocoon’. Y yo vivía dentro de ese universo que había creado. Creo que está muy bien, y de alguna manera me ha preservado la niñez mucho tiempo. Voy a cumplir 30 años, y emocionalmente, nada! (risas). Cuando empecé con Maïa Vidal yo tenía 23 años, y me hice ese nido, esa burbuja, y no he crecido; he estado en ese mundo. Creo que, de alguna manera, necesitaba desmelenarme un poco y no pensar tanto, con música un poco más rockera, un poco más punky. El oyente no está buscando escuchar algo que no hayan escuchado en su vida, quieren algo con fuerza, poder, energía, y bien hecho, o no (risas). Pero con rollo. Siento que con Maïa Vidal, como yo he cambiado tanto en todos estos años y la música ha cambiado, mi marca es lo inesperado. Curro mucho en buscar melodías no obvias, arreglos extraños, instrumentos distintos. Buscar lo raro. Quería algo obvio, visceral, y que casi no tenía ni que pensar al componer. En casa compongo con un ukelele, pero sale todo así, súper rápido.

Y por otro lado, el año pasado tuve la sensación de que el mundo se iba a la puta mierda (risas). Empezó con el Brexit, y Trump, ISIS, Italia… tenía esa sensación de “¿Qué está pasando?”. Empecé un momento muy de ‘you only live once’ (‘sólo se vive una vez’). En plan, esto se va a acabar y hay que disfrutar. Al principio se manifestó de un lado más promiscuo…

INDIE LOVERS: Tinder! (risas

MAÏA: Por eso estaba en Tinder (risas). En plan “el mundo se acaba!”. Cuando yo tenía mi banda punk, eran los años Bush. Cuando yo era adolescente, lo era con esa rabia. Con esa sensación de protesta, de sentir que la cosa va mal. Creo que sin pensarlo, empezamos a tocar con Eduardo en febrero. Como mucho era un mes después de la proclamación de Trump. Mi adultez fue con los años Obama, que todo era muy tranquilo, ‘Yes, we can’… que pasara eso fue un shock. Realmente fue muy fuerte. Después de pasar semanas llamando a mis senadores y publicando cosas en Facebook, muy activista en la distancia, empecé a sentir esa sensación de “fuck it!”, quiero tocar fuerte y descargar esa energía. Por eso ha funcionado. En estos días tan caóticos, que no se entiende nada, que cada momento abres las noticias y sale Corea del Norte, Trump, independencia sí o no… hay tantas cosas horrorosas en el mundo que estar encerrado tocando rock fuerte es una especia de descarga que te hace sentir algo, y puedes llevar esa energía a otro sitio. Porque si no, te vuelves loco.   

INDIE LOVERS: Seguramente es estos tiempos tan complicados que dices, con Trump, Corea del Norte, la Catalunya independiente o no… en estos últimos años echaba a faltar más mala leche en el rock. Supongo que por ahí va también la cosa.

MAÏA: Es que es muy fuerte! Pienso en la última vez que el rock y el punk-pop fueron mainstream, en el principio de los 2000, con Green Day, Rancid… la gente estaba a full con las historias muy de protesta. Uno de los primeros discos que compré con mi primer coche a los 16 años fue una compilación que se llamaba ‘Rock against Bush’ . Y eran todos los grupos punk y rockeros que hacían canciones contra él. Tuvimos ese momento muy cómodo, aunque había crisis. Pero era un momento un poco más cómodo, y habían temas más acústicos, más bonitos, más rebuscados, y más delicados. Y podíamos darnos el lujo de estar com más relajados en ese momento. Y ahora creo que sí, es lo que toca. Tenemos una canción que yo escribí por Trump, pero luego cuando lo hablamos, el batería es venezolano, la guitarrista es de aquí… y yo les dije: “todos tenemos unos presidentes de mierda”, con perdón (risas). No soy la única aquí que tiene bastante rabia contra el presidente de su país. Estaba escribiendo canciones en los que me he dejado soltar con temas más promiscuos y juguetones, muy como guarras (risas). Porque claro, somos una banda que nos conocimos en Tinder (risas). Tenemos una canción que dice ‘My love for you is nothing like a love song’. Algo así como ‘mi amor por ti no se puede usar en los mismos términos de canción de amor normal’. Es muy explícito, y lo tomamos muy a broma. Pero también tenemos una canción que transmite esa sensación de “pero tú eres lo peor!”, que se llama ‘Your Face Is A Butt’ (‘Tu cara es un culo’) (risas). 

logo-1024x1024

INDIE LOVERS: Háblame de esas canciones. Yo sólo he podido escuchar una. ¿Cuándo vamos a poder escucharlas?

MAÏA: Hemos estado grabando un EP en Sol de Sants, que ha sido otra oportunidad increíble. Alberto Pérez no sólo lo está produciendo, sino que también es como el cuarto Side Chick. Des del día 1. Yo le envíe los temas, porqué es uno de mis mejores amigos, y también le envíe unas demos de Maïa Vidal. La siguiente vez que le vi me dijo “Side Chick! Lo quiero grabar!”. Y yo le dije “¿Y qué te parecieron los otros temas?”. Y él: “No me importa nada más que Side Chick!”. Y yo súper dañada (risas). Ha creído tanto en el proyecto desde el día cero, y lo ha impulsado bastante. Nos falta por mezclar el último tema, pero tenemos ese EP de 5 temas grabado. Y tenemos 6 canciones más. Así que ahora la pregunta es: “¿Sacamos el EP? ¿Seguimos grabando más y hacemos un LP?” Vamos a ver. Yo creo que saldrá dentro de poco. Lo que más me empujaba a sacar lo de Side Chick es que todo ha fluído. Me hizo pensar bastante en lo que pasó cuando llegué a Barcelona. Yo no tenía ninguna intención de tocar música. Yo venía a hacer animación, estudiar cine, a cualquier otra cosa. Sin querer, Barcelona me ha puesto esta gente, estas oportunidades y conexiones en mi camino para decir: “no, no, no! Toca música. Hazlo!”. Una de las primeras personas que conocí aquí fue Alberto; toqué en una banda con él. Esa misma energía de que de repente todo encaja, y los temas llegaron de manera tan veloz y tan fácilmente, sin ser demasiado mística, me hizo pensar que tampoco había que dejarlo como una chica de lado, porqué tiene algo. Creo que se ha destapado algo. Me siento a tomar un café y, de repente, me sale una canción de Side Chick. Necesitaba esa facilidad, me faltaba algo inmediato que no tuviera que pensar mucho. Y además, aquí puedo colaborar más. Con mi proyecto, estoy encerrada en mi mundo; lo hago sola, muchas veces hago los arreglos sola, grabo todo sola, es todo mi mundo. Mientras ahora a veces tengo un estribillo, una estrofa, un puente, una intro, pero no sé en qué orden. Lo dejo mas o menos así, con la melodía, y se lo enseño a Eduardo. Él tiene una mente de arquitecto, como de hacer puzzles, y lo organiza y lo pone todo en su sitio. Se lo enseñamos a Scarlett, montamos los arreglos juntos, y Alberto pone su parte. Después de estar tanto tiempo aislada del mundo exterior en mi nido, en mi ‘cocoon’,  estar ahora colaborando con más gente hace que todo fluya mucho más.

INDIE LOVERS: ¿Cuándo vamos a poder ver a Side Chick? ¿Conciertos previstos?

MAÏA: Nuestro primer concierto, nuestro debut (que yo digo siempre que sólo va a haber un debut; porqué nos podrán ver en otras ocasiones, pero sólo habrá un debut) es el viernes 13 en Sidecar. Eso me encanta: Side-car, Side Chick, y el viernes 13. Cuando nos lo propusieron fue como “Yeah! Friday the 13th! Viernes 13! Sidecar!”. Además, yo he tocado en muchas salas en Barcelona, pero nunca he tocado en Sidecar. Y los conciertos que yo he visto en Sidecar han sido bandas súper rockeras. Estuvimos el lunes viendo a Dirty Fences. Todo esto me está haciendo renacer la vena rock y punk. Yo no soy muy de ir a conciertos, pero ahora ver música así, en sitios así, pequeños y rockeros, me encanta. Este verano vi a Deap Vally en Razzmatazz y aluciné! Flipé en colores! El problema que tengo con la música que hago para Maïa Vidal es que, como trato de ser única y hacer cosas inesperadas, cuando escucho algo parecido y que me gusta, en vez de disfrutarlo pienso “ah! Ojalá hubiera pensado eso yo!”. Es una mierda, no debería pensarlo así. Pero como quiero hacer algo interesante y distinto, pienso “Aaaagghhhh!! Ojalás hubiera pensado yo en hacer eso!” (risas). Mientras con Side Chick, aunque es volver a mis raíces, también es comenzar de cero, tengo más actitud zen. Estoy en la etapa esponja. Cuando vi a Deap Vally estaba con los ojos como platos. “Guau! Qué chulo!”. Esas mujeres son la bomba. Y también cuando vi a Dirty Fences en Sidecar. También queríamos ver el sitio y recordar cómo era. En mi vida todo es bastante cíclico, y estoy en ese momento de volver a querer la inmediatez del rock’n’roll. Y como ahora parece que el rap ha sobrepasado al rock, de alguna manera mi parte rebelde dice “como el rock ya no es cool, vamos a hacer rock!” (risas).   

Como os decíamos, tenemos 2 entradas dobles para el concierto de Side Chick y Sharma Den este viernes en la sala Sidecar de Barcelona. Como es habitual, si quieres optar a ellas, haz RT en twitter, comparte en Facebook, o en Instagram danos un like y etiqueta a la persona con la que quieres ir. El viernes al mediodía damos los nombres de los ganadores! Para que te hagas una idea de por dónde van los tiros, puedes escuchar este ‘Love Song’ que nos ha hecho llegar Maïa Vidal en exclusiva. Raw power!

Tags from the story
, ,
Escrito por

Rarito como un tema de Sonic Youth; me excito con el ‘Psycho’ de los Sonics; si me cabreo, Pistols, RATM, Sandré, riot grrrls o Los Punsetes; me ponen igual soul, r’n’b, ye-yé, garaje, punk, r’n’r, indie o brit-pop. De mayor quiero ser Patti Smith, Iggy o John Waters. Ateo hasta que conocí a PJ HARVEY. Fui negro en otra vida… y hago el impostor como periodista musical y deportivo en radio, TV, webs y revistas varias.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *