Hay bandas con las que cuesta ser imparcial. Bueno, la imparcialidad no existe, pero siempre es un objetivo al que acercarse cuando tienes que intentar escribir algo de la manera más rigurosa y precisa posible. Pero claro, hablamos de música. Y la música es emoción. Y es percepción. Y es memoria. Y es recuerdo de todo lo que alguna vez te hicieron sentir esas canciones que vuelven a sonar ante ti; arrollándote, saqueando tus entrañas y poniéndote tu pasado en las narices. El bueno y el malo. El que ilumina y el que duele. El de sonrisas y el de lágrimas. Y ante esta avalancha emocional, puedes reaccionar de mil maneras. Puedes reír, puedes llorar, puedes saltar y puedes cantar hasta quedarte sin voz. Porque hay bandas que no hacen canciones. Hacen himnos generacionales que hay que liberar hasta desgarrarte las cuerdas vocales. Los Planetas son esa banda.

De todos es sabido que un concierto de los granadinos es como un melón sin abrir. Te puede salir bueno, te puede salir regulero, y te puede salir malo. Y cuando vuelve a tu ciudad la banda a la que has visto más veces en tu vida (ya soy incapaz de contarlas, pero debe rondar la veintena en otros tantos años), siempre acudes con dos incertezas: una, cómo sonará el concierto-melón; y dos, con qué setlist se presentarán. Cuando las dos cosas fallan, concierto-castaña. Cuando al menos tienes una de las dos, la noche te va a salir arregladita. Pero cuando se alinean los ídems y ambas parcelas salen bien, entonces se destapa el tarro de las esencias y las euforias. Y esta noche toca esta combinación. Podemos cantar bingo. Y luego, las 25 canciones que nos van a regalar, afortunados de nosotros.
El inicio ya es toda una declaración de intenciones: poco más de 7 meses después de su concierto en la sala Apolo, esto no va a ir sólo de presentar las canciones de su último álbum, ‘Zona Temporalmente Autónoma’. Y por eso, en cuanto suenan las primeras notas de ‘San Juan De La Cruz’, se nos ilumina la cara como si volviéramos a tener 20 años: cuidado, que esto puede ir de avalancha de hits y canciones antiguas. Y tampoco va a ser exactamente eso, pero se va acercar. Con la banda entre sombras, humos y contraluces, ‘Seguiriya De Los 107 Faunos’ nos devuelve al presente, y da pie a la parte ‘flamenca’ del show. El subidón de ‘Ya No Me Asomo A La Reja’ empieza a removernos las tripas, poros y fluídos lagrimales, y el primer corte de bisturí lo ejecutarán minutos después: “una vez, si mal no recuerdo, me tenías en la punta de los dedos“, cantamos con una mezcla de rabia y autosuficiencia. “A veces pienso en lo estúpido que fui, las fuerzas que gasté, el tiempo que perdí“. ‘Amanecer’ e ‘Islamabad’ nos devuelven a la lisergia más atmosférica, y haremos bien en ponernos ya el cinturón: atención, que vienen curvas.

“Yo no tengo la culpa de que te fumes plata…“, y Éric empieza a darnos martillazos en el alma a golpe de la batería más contundente a este lado de la Alhambra. “Puedes buscar por tierra, puedes buscar por aire, que como yo te he querido, no va a quererte nadie”. Los demonios que fueron santos salen en manada a buscar víctimas entre la audiencia coleccionista de catástrofes emocionales. No tienen piedad alguna con ‘Segundo Premio’, provocando lágrimas emocionadas alrededor que despiertan ternura y ganas de pasar el secador y cambiarlas por preciosas sonrisas. Nos dan un respiro con ‘Un Buen Día’, y aquello vuelve a ser un karaoke de cuarentones que se sienten dos décadas más jóvenes. ‘Espíritu Olímpico’ es un presente que encaja a la perfección con el pasado y nos permite soñar con una nueva y excitante página en blanco de gitanas a las que comprarle en Granada la mejor cueva que hubiera; si nos quisieran, claro. Y claro que nos van a querer, porque “puedo hacer una prueba, puedo hacer que me quieras, puedo andar dentro de ti, puedo estar en tu cabeza, y que no mires a nadie nunca más”. ‘David y Claudia’ dan paso a ‘Jose y Yo’, y me pregunto “qué placer obtienes de algo que nunca has probado (…) sólo somos enfermos, pero es que nunca tuve una enfermedad más dulce”. Y en pleno éxtasis nostálgico, nos rompen por completo con ‘Prueba Esto’: “Hay un millón de mundos por descubrir, te los podría enseñar, puedes venir conmigo, o puedes quedarte ahí”. Y prenden la mecha con alegría: “parece que hay un incendio, cada vez que nos juntamos; parece que hay un incendio, cuando tú estás a mi lado”. Y llega la hermanita para rematar este primer terremoto y poner un punto y seguido: “Vente conmigo, prima, vente conmigo. Va la luz de la luna por el camino. Donde nadie nos vea. Aunque sea de noche y yo sea un amigo“.

Y esto no puede acabar así, claro. La preciosa ‘Zona Temporalmente Autónoma’ nos mete en un mundo de fantasías y días por celebrar, pero no sin antes cerrar capítulos que escuecen: “van a hacerme presidente de los estados de ánimo, vamos a manipular los resultados”. Y ya estamos a punto para gritar desde lo más hondo de nuestro océano de frustraciones acumuladas “cuando veas lo imbécil que has sido, cuando veas que lo has hecho fatal”.
Pasada la página, el segundo bis es un clímax en la hemeroteca emocional en la que nos hemos metido. Estamos ávidos de nuevas sensaciones, porque “algunas de estas cosas no estarían mal. Quiero probar algo nuevo”. Se produce una ‘Reunión En La Cumbre’ y decidimos que nos toca las pelotas que nos casquen 9 euros por una cerveza. Y la piel ya no es que se nos ponga de gallina sino de avestruz cuando suenan las guitarras y J canta ‘De Viaje’: “podemos irnos juntos lejos de este mundo tú y yo. En un viaje de galaxias infinitas hacia el sol”. Joder, que también han tocado ‘De Viaje’, la madre que los parió…!

Tras dos bises y más de dos horas, el público se niega a irse y corea “no será peor de lo que era, no será peor, seguro que es mejor”. Y aunque hoy no quieran celebrar ningún cumpleaños total, lo que nos falta no se queda corto: cierran abriendo ‘La Caja Del Diablo’ y su inquietante historia fantasmagórica. Y tras llevarnos de viaje por diferentes etapas y capítulos de nuestras putas vidas, un J que durante la noche se ha referido a la lucha y la valentía del pueblo catalán, resumirá a la perfección el concierto en la última frase de la última y diabólica canción: “Algo muy difícil de explicar con palabras”.
Setlist:
- 1. San Juan De La Cruz
- 2. Seguiriya De Los 107 Faunos
- 3. Ya No Me Asomo A La Reja (Fandangos)
- 4. Si Estaba Loco Por Ti (Verdiales)
- 5. Corrientes Circulares En El Tiempo
- 6. Hierro Y Níquel
- 7. Parte De Lo Que Me Debes
- 8. Amanecer
- 9. Islamabad
- 10. Santos Que Yo Te Pinté
- 11. Segundo Premio
- 12. Un Buen Día
- 13. Espíritu Olímpico
- 14. David Y Claudia
- 15. Jose Y Yo
- 16. Prueba Esto
- 17. Alegrías Del Incendio
- 18. Ijtihad
Bis 1:
- 19. Zona Autónoma Permanente
- 20. Canción Del Fin Del Mundo
- 21. Pesadilla En El Parque De Atracciones
Bis 2:
- 22. Nuevas Sensaciones
- 23. Reunión En La Cumbre
- 24. De Viaje
Bis 3:
- 25. La Caja Del Diablo
Hace muchos años ya que Los Planetas no dan malos conciertos, podríamos ir superando tópicos ya
Una maravilla de concierto!