Curiosamente, la banda de Nottingham Tindersticks editó dos discos homónimos en el inicio de su carrera: el primero, en 1993, y este segundo, dos años después. Un álbum que corroboraba las delicias del debut, y preparaba el terreno para el monumental ‘Curtains’ que iba a llegar en 1997. En todos ellos, dos denominadores comunes que impregnaban el ambiente de elegancia y nocturnidad: la imponente y seductora voz de Stuart Staples (una de las voces masculinas más hipnóticas y sugerentes de la música de las últimas 4 décadas) masajeándote el alma, y las majestuosas instrumentaciones orquestales de Dickon Hinchliffe. Imposible no pensar en el maestro Gainsbourg o en Scott Walker al escuchar piezas llenas de emoción y sentimiento como ‘A Night In’, ‘Tiny Tears’, ‘Snowy In F# Minor’, ‘Travelling Light’ (un dueto con Carla Torgerson), o la escalofriante ‘No More Affairs’. En ‘My Sister’ también había un speech de la cantante de Drugstore, Isabel Monteiro. Un disco desgarrador y plácido al mismo tiempo.
Y como hacemos siempre, completamos la onomástica recuperando un concierto de Tindersticks en aquél lejano 1995, en el Bloomsbury Theatre de Londres: