Diciembre, de nuevo. Momento para echar la vista atrás y repasar los doce últimos meses de tu vida y darte cuenta de todo lo que ha sucedido en ella. Hablamos de música, pero podría extrapolarse al resto de aspectos vitales que van sucediendo sin pausa a lo largo de 365 días cada vez más fugaces. Me pregunto si esto es lo que se entiende por envejecer, que todo pase cada vez más deprisa y parezca menos consistente. ¿Alguien en la sala que se sienta así?
Si en 2017 tenía la sensación errónea de haber hecho muy poco durante el año, en este 2018 sí soy consciente de haberme autoimpuesto cierta dosificación musical. No en casa o a la hora de escuchar y descubrir nueva música, sino en cuanto a conciertos y festivales. Creo que los intensos 2016 y 2017 me provocaron cierta saturación tras Primavera Sound y Cruïlla y este último trimeste de 2018 lo he vivido con mucha más calma. Aun así, he disfrutado de discos, conciertos y canciones que intento recopilar aquí. Se me escapan y olvidan muchos -este año no los he apuntado tan a conciencia en la agenda-, así que he optado por resumir este 2018 musical con los primeros recuerdos que me han venido a la mente. Si me acuerdo de ellos será porque son los importante.
DISCOS 2018
‘El Rojo y el Negro’, Egon Soda
Mi disco del año y también el más escuchado según el reciente informe de los señores de Spotify. No me pueden gustar más las letras sofisticadas de Ferrán Potón y esa voz tan quebrada de Ricky Falkner. ‘El Rojo y el Negro’ huye de los discos amorosos para cantarle a la vida, a la situación actual en la que está inmersa la sociedad y a la amistad. Y lo hace desde una elegancia que pocas bandas alcanzan. Con ellos tengo sensaciones encontradas. Me parece de máxima incomprensión la poca repercusión que tienen entre la gente, pero me encanta que se mantengan en un segundo nivel para disfrutarlos más intensamente.
Hace unos meses no me habría imaginado colocando un disco como el de Ferran Palau entre mis favoritos del año, pero la belleza y delicadeza de su música me han acabado por enamorar. Blanc es un disco bonito, sin más. Melancólico, pero bonito y emociona.
El tercer disco en solitario de Jonathan Wilson -guitarrista de Tom Waters- te traslada y eleva a otra dimensión. Me resulta imposible explicar qué tiene que lo haga tan especial, pero escuchando ‘Loving You’ ya se entiende la magia de un disco con mucho más toques dance y una ruptura sentimental como hilo conductor. Disfrutar de su directo hace unos meses en Razz3 fue un auténtico viaje cósmico y musical.
Hay voces que cautivan y la de Alice Wonder es una de ellas. No recuerdo cómo llegué a ella, pero los primeros acordes y esa voz tan ‘soul’ me noquearon a la vez que me hacían dudar. ¿ Se trata de una mujer o de un hombre? El color de su voz es tan especial que podría ser todo y nada. Perfecto para viajar en coche y dejarse mecer por ritmos más propios de estilos poco habituales en el indie nacional. ¡Ganas de verla en directo!
‘Natural Rebel’, Richard Ashcroft
Por esperado y por ser Richard Ashcroft. No es de los discos que más he escuchado este 2018 -se publicó a finales de octubre-, pero sí de los que más me han gustado. Algunas canciones del inglés llevan años acompañándome y su música siempre es un win para mí. Así que celebro que siga sacando discos.
CONCIERTOS
Un clásico entre los clásicos. Prefiero no contar las veces que he visto a los barceloneses en directo en un año en el que han celebrado dos décadas sobre los escenarios. Precisamente, uno de esos conciertos lo recuerdo como uno de los mejores que he vivido junto a ellos. No fue ni en el Liceu ni en el Price de Madrid, sino en el Palau de les Arts de Valencia. Sublimes y soberbios, así estuvieron Santi Balmes, Julián Saldarriaga y compañía en lo musical y en lo personal con el público allí presentes. Un concierto de 10.
The National (Primavera Sound)
Tenía pendiente ver un directo de Matt Berninger. Pese a tenerlos cada dos por tres en el Primavera Sound no fue hasta este año cuando, por fin, pude coincidir con ellos en el Fòrum. Fue el concierto que más disfruté del festival por las ganas que tenía de disfrutar de mi banda internacional favorita y por el carisma y elegancia de Berninger. Este 2018 fue el año de sacarse una espinita y disfrutar del que fue el disco que más escuché en 2017.
Acabo de darme cuenta que aquí también repito. Por segundo año consecutivo, el cantautor sueco ocupa un puesto de honor entre mis conciertos favoritos. Pero es que fue exquisito verle tocar junto a una espectacular orquesta en el Auditori de Barcelona dentro del Festival Mil·leni. La reinterpretación de sus canciones y la incorporación de elementos como unas simples bolsas de plástico en el sonido de su música me voló, casi literalmente, la cabeza. Supongo que cada vez soy más de mis artistas y grupos favoritos.
FESTIVALES
Este año sea, tal vez, el año menos festivalero de los últimos tiempos. La saturación que comentaba anteriormente… o la edad. Reconozco que cada vez me cuesta más pasarme horas y horas de un lado para otro acumulando cansancio a un ritmo superior al que acumulo música y nuevos artistas. El Primavera Sound me pilló con una buena gripe y supuso ciertas decepciones musicales. El Vida me pilló fuera de Barcelona y me resultó imposible escaparme a otros festivales de la geografía española. Así que por descarte, pero también por el concierto más alucinante y diferente de todo el año, me quedó con el Cruïlla y el señor David Byrne. Podría haberlo puesto como el mejor concierto del año, pero así queda justificada la elección de un festival que cada vez me gusta más por ser un festival a escala humana.
PLAYLIST
Y aquí van las diez canciones que más me resuenan en este 2018. Seguro que en cuanto publique este resumen recordaré alguna otra. Pero, como todo en la vida, la música también es cuestión de ánimos y hoy son estas diez canciones las que me vienen a una memoria cada vez más selectiva. Me he propuesto volver a apuntar conciertos, discos y festivales en la agenda para que en 2019 resulte mucho más fácil -no sé si más fiable- este resumen de lo mejor del mundo. Aviso, no están todas por orden.
‘Te pierdo’, Egon Soda
‘El austronauta que vio a Elvis’, Love of Lesbian
‘Loving you’, Jonathan Wilson
‘Guerra y Paz’, Zahara con Santi Balmes
‘Serà un abisme’, Ferran Palau
‘It’s enough’, Lenny Kravitz (no es indie, lo sé)
”Bajo la piel’, Alice Wonder
My enemy’, Chvrches con Matt Berninger
‘Belleville Blues’, Murray A. Lightburn
‘Ahí te quedas, Perarnau’, Mucho